«San Benito … a todos les recuerda su obligación de respetar la Regla, no porque es una ley, sino porque es la norma de vida que profesaron y que libremente aceptaron…es particularmente duro e intransigente con los monjes que puedan resultar murmuradores, inquietos, tergiversadores y falsos… no merecen estar en el monasterio.»
F. Rafael de Pascual